Si piensas que tú o alguien de tu entorno puede tener inconvenientes con el juego, recuerda
que siempre puedes pedir asistencia.
Todos ganamos con el juego responsable. Apostemos por él.
Por ello es importante que lo sepas:
El jugador responsable:
- El jugador responsable juega para divertirse y entretenerse, no para ganar dinero.
- Sabe que puede tener suerte y ganar, pero que también puede perder.
- Jugar responsablemente significa tomar decisiones basadas en hechos, manteniendo el control
sobre el tiempo y el dinero que quiere gastar.
Jugando responsablemente, hace que la actividad del juego sea una experiencia agradable,
divertida, sin riesgo de daño a sí mismo, familia y/o amigos.
Como jugar con responsabilidad:
- Juega por diversión, no por dinero o para evadir problemas.
No persigas o intentes recuperar las pérdidas.
- Juega para divertirte, disfruta al ganar pero considera que también puedes perder.
No pidas dinero prestado para jugar. - Juega solo el dinero que hayas decidido destinar a la diversión. No utilices nunca el dinero que
destines habitualmente a sus gastos fijos, como comida, transporte, .. - En tiempo de crisis emocional disminuye el autocontrol: evita jugar en esos momentos.
No permitas que el juego afecte a tus relaciones con la familia y amigos. - Establece un límite de tiempo y de dinero para jugar.
El único juego medido es el juego divertido.